Hay bodas que parecen un photocall. Y hay bodas que parecen una película.

En Purafoto no fotografiamos decorados ni sonrisas ensayadas. Lo que buscamos es lo que queda cuando bajan las defensas: una mirada sostenida, un gesto torpe, un abrazo que no se suelta. Porque eso —lo verdadero— es lo que resiste al tiempo.

¿Qué es una boda con personalidad?

Una boda con personalidad no es una que rompa moldes por romper. Es una que respira a través de cada decisión. Desde el vestido hasta la canción del primer baile. Desde la luz que entra por la ventana hasta el ramo de flores silvestres atado con una cinta heredada.

Es una boda que no copia. Que no se disfraza. Que se atreve a ser íntima, imperfecta, irrepetible.

La belleza de lo real

A veces lo más elegante es lo más honesto. Y eso se nota en las fotos. No hay necesidad de posar como en una campaña de moda si la emoción ya está ahí. El arte está en saber verla. Y el lujo, en poder recordarla con verdad.

Por eso nuestras fotografías parecen sacadas de una película. Porque no se trata solo de técnica: se trata de estar atentos, de mirar con respeto y de contar desde dentro.

Una historia real: ella, su ramo, sus tatuajes

Recuerdo perfectamente la primera imagen que vi en su móvil: ella, sola, sujetando el ramo como si fuera parte de su historia, no un accesorio. Vestido blanco, escote cruzado, flores del campo y tatuajes visibles sin pudor. Era pura poesía.

No había artificio. Solo verdad. Y eso lo cambia todo.

¿Y tú, cómo quieres que se recuerde tu boda?

Si estás planeando una boda que sea más que una fiesta —una que cuente quiénes sois, que emocione sin filtros y que merezca ser recordada como se recuerda una escena inolvidable de cine—, quizá ya sepas que lo que necesitas no es solo un fotógrafo.

Necesitas alguien que entienda lo que significa mirar de verdad.

 Si sientes que esta forma de mirar conecta contigo, estaremos encantados de escucharte. Puedes escribirnos cuando quieras a hola@purafoto.es o en @dortega_wedding